15/09 Charlotte NC - Zac Brown Band

Antes de empezar: Vamos a intentar responder los comentarios que haceis, aunque desde el móvil es complicado. No sé si os avisará de que respondemos o no...

Y otra cosa... ¿nadie ha visto el segundo avión de la foto de ayer?

Pues nada, vamos con lo de hoy...

El hotel es barato. Y no porque esté mal, es el motel típico de carretera estadounidense. Cama enorme, mininevera, microondas, tele y baño. Y moqueta. Moqueta everywhere. ¿No se dan cuenta que es más limpio y cómodo fregar?

Decía que el hotel es barato por la situación. Está a las afueras de Charlotte (Carolina del Norte, que aquí hay que decir siempre buenos días, buenas tardes y el estado en que te encuentras). Bueno, está en las afueras de las afueras. De hecho, en el extraradio de las afueras de las afueras. Pero es barato y la situación no nos preocupa mucho porque no haremos nada cerca del hotel.

Para hoy tenemos previsto visitar un outlet y luego irnos de concierto. Country, por supuesto.




Este es Alan. Es el Dodge Challenger que nos acompañará estas tres semanas a través de Norteamérica.

De momento nos ha llevado hasta un Walmart a por cosas de primerísima necesidad, como agua, champú y camisetas.




Luego al outlet de Concords Mills Boulevard. Pequeñito. Bien de precio pero poca oferta. No pasa nada, tenemos algunos más en la ruta...

Lo que más me gusta de los outlets es el food court, que es el lugar donde están todos los restaurantes. Enmedio hay un montón de mesas y sillas, por lo que cada uno puedo cojer comida en un sitio diferente pero sentarse juntos.




La marca por excelencia para mi es Panda Express, una cadena de comida rápida asiática con un pollo a la naranja legen...dario! Aquí no hay, pero le han salido tantos clones que parece un episodio de Star Wars. Así que atacamos al pollo a la naranja, pollo al bourbon y fideos o arroz.




Estoy firmemente convencido que si los americanos entendieran lo que es una ración normal de comida, con los excedentes terminábamos con el hambre en el tercer mundo. Y en el cuarto, incluso.

Aquí casi todo son cosas de marca, pero ya empezamos a ver cosas relacionadas con el country.




Después de comer llega la modorra. Normal, acabamos de rellenarnos como un pavo el día de Acción de Gracias y además nuestro reloj biológico dice que son las 21:30h... A este paso no llegamos despiertos al concierto. Una siestecita reparadora en el coche nos ayudará a guardar fuerzas para el momento fuerte del día: Zac Brown Band.




Si queréis saber que han tocado, aquí teneis las canciones del concierto en una lista de spotify.

O este vídeo, de calidad regulera:

O este, que no es mío:



Zac Brown Band es un grupo que toca muy bien y canta aún mejor. Y con unas letras preciosas. Los descubrí gracias a Paqui, a quién a partir de ahora apodaremos -con todo el cariño- "Paquipedia", porque es una enciclopedia de la música country. En serio, si quereis saber algo de música o a quién escuchar o descubrir, preguntadle. Por cierto, la guitarra de Willie Nelson se llama Trigger. ;-)

Es alucinante lo que mueve aquí un concierto de country. Había 4 veces más de gente aquí trabajando que público en la última edición del Cowboy Boots Festival de Barcelona. Y contando que, aparte de las entradas, una camiseta eran $35, un agua de litro $7 y una lata de cerveza $12... pues es un negocio.

Eso sí, riete de los botellones. En el parking, repito, EN EL PARKING montan una carpa, sacan unas sillas de camping y hacen una puta barbacoa. Pero no un grupito de ellos, no... Decenas de barbacoas!

En un plis plas desalojan todos los coches de los diferentes parkings que rodean el PNC Music Pavillion y aquí no ha pasado nada. Y eso que, al ver tanto coche, he llegado a pensar que era más fácil tirarlo todo y volverlo a construir que vaciarlo.

Bueno, hemos empezado por todo lo alto. A partir de aquí, la cosa ya no puede mejorar... ¿O sí?

Juan Carlos