martes, 4 de octubre de 2016

03/10 Rocky Mountains - Denver

Nos vamos al Rocky Mountain National Park, o la parte más bonita y alta de las Montañas Rocosas.




Tenemos un montón de kilómetros hasta Denver CO en los que lo único que haremos será conducir y disfrutar del paisaje. Bueno, y echar alguna fotillo también. Aquí tenéis una pequeña muestra de lo que ha sido el día.

YouTube Video


Como habréis notado, el tiempo ha ido empeorando a medida que subíamos. La carretera transcurre por encima de los 3.400 metros (más que el Aneto) y en unos días, en cuanto vengan las nevadas fuertes, la cerrarán hasta Marzo.

Hemos pasado de ir en camiseta a estar a -4º, con una nieve que en lugar de copos estaba hecha de bolitas de hielo.




Las vistas, impresionantes. En muchos sitios se nota perfectamente la línea a partir de la cual ya no hay árboles. Mientras los hay, son inmensamente altos. La llegada del otoño hace que empiecen a cambiar de color y la paleta de amarillos y ocres se vuelve infinita.




Los únicos animalillos que hemos visto son chipmunks o ardillas rayadas.










Hay una zona con lagos, especialmente el Grand Lake, alrededor del que florecen tiendecitas y cosas turísticas. Y patos muertos de frío.




Se nota la altura y la falta de oxígeno, vuelven -aunque más suaves- los mareos del otro día. En las camisetas que venden en el Visitor Center, la frase de moda es "Got oxygen?". Son unos cachondos.

Por suerte, además de camisetas tienen comida y especialmente una reconfortante sopa de verduras (a precio de caviar ruso traido en vespino por el mismísimo Putin) que con el frío que hace sienta de maravilla de cojón de mico.




Seguimos bajando y nos acercamos a la civilización, porque ya empezamos a ver los autobuses que hacen la ruta para llevar y traer a los niños al colegio. Siempre he pensado en cuanto tendrá que madrugar el que viva más lejos...







Fuera del parque nacional hay un montón de casas de portada de la revista Hola. Pero también pasamos por algún camping de caravanas, que no es de veraneo, sino que hay gente con pocos recursos que vive aquí permanentemente (¿alguien ha visto la serie "Me llamo Earl"?)




Es agradable, a pesar del frío, la lluvia y el fuertísimo viento, encontrarse con la naturaleza. Me hace recordar de donde venimos, que importantes nos creemos y qué poca cosa somos en realidad...




Juan Carlos

7 comentarios:

  1. Segur que aquestes imatges no són d'una revista de viatges?
    Impressionants

    ResponderEliminar
  2. Ondi quins contrastos, sort que sou previsors i portaeu anoraks! Aqui un que es va empassar sensera "Me llamo Earl"!!!! ;-)

    ResponderEliminar
  3. Jo només vaig veure un capítol.. però quan he vist la foto sí que m'ha fet recordar :)

    El demés ja he dit... IMPRESSIONAnt... i segur que la sopa també... jajajaj (com he rigut).

    P.D: No et veig amb les ulleres... perdudes totalment???

    Carol

    ResponderEliminar
  4. Sí, perdudes... Porto unes altres pero no acaben d'anar be... Pero per lo que van costar...

    ResponderEliminar
  5. Que gran és tot a Amèrica, quan vam ser al Canadà ja ens va nevar a mig setembre.

    Els colors de la tardor impressionants, la propera vegada acosteu-vos a New England a la tardor.

    Hi ha força jubilats que es venen la casa, compren una autocaravana de les més grans (com un autobús) i es passen l'any a càmpings, a l'hivern van a Florida o Califòrnia.

    Quan para l'autobús escolar es para el tràfic, tant d'un sentit com de l'altre, això ens va sorprendre una mica, com lo dels 4 Stops a les cruïlles o que puguis girar a la dreta encara que el semàfor estigui en roig. Els busos escolars són iguals als USA i al Canadà

    Ramon i Lluïsa

    ResponderEliminar
  6. Els colors dels arbres aquesta època son genials. I la sopa deuria estar boníssima. Jeje

    ResponderEliminar